sábado, 12 de noviembre de 2011

GRACIAS A TODOS.


Fotografías de MAYO de 1994


Mi última entrada ( "TODO VUELA. HASTA LA ESPERANZA"), ha tenido, para la modestia de este blog, una pequeña, pero inusitada (y muy estimulante para mi vanidad) reacción, entre la amabilísima gente que me visita.

Va para ti, mi ya querida ANNA GENOVES: Puedes "llegar", qué duda cabe. Tienes el empeño y la fuerza. ¡Importantísimos!.
Ahora bien, debo (no por modestia -ni de la falsa ni de la buena-) decirte que existen unos miles de "maestros", antes que yo, de los que aprender.
Ocurre que con mis años (¡tantos escribiendo!) va y de vez en cuando me visita y guía mi pluma una hermosa musa y sale de mis adentros hasta el papel algo que se podría considerar bueno. Pero no debo ser yo tu guía.
Eso sí, la literatura (prosa e intentos poéticos) no la concibo de otra forma que con fuerza agresiva y sí (¡sabes leer!), no es nada autobiografía pero sí PURA VIDA, quizás mía, quizás copiada, quizás tratada con la fuerte impresión de lo captado en lo ajeno, y puede que, por el mismo sendero más cosas. Pero, ¡ojo!, no se copia. El hecho propio o ajeno te conmueve y te fuerza a cumplir un destino al que nadie te ha obligado...Nadie sabe realmente la razón, pero tú ¡tienes, por narices, que escribir sobre ello! Y cuando con el último suspiro de tu alma, extenuada, dejas caer la pluma sobre los folios, al rato lo relees todo y ves que, allá en lo profundo, todavía bulle el hecho que te movió a ese relato, novela, poesía... pero, pero ¡tú has creado algo nuevo, una ficción literaria que también es VIDA! Y que, al menos, para mis ideas, habrá brotado de una realidad vital, pero lo que tú has escrito es, SIEMPRE, OTRA COSA, OTRA VIDA, OTROS SUFRIRES Y OTROS GOZOS.

He leído, ANNA tus dos últimas entradas. El reportaje del programa de televisión Callejeros me ha parecido magnífico, tal como si fuera tuyo propio o hubieras sido tú misma la visitante del trágico escenario. No parecías contar nada "de segundas" sino de "primerísima" fila en conflicto tan terrible... "¡Ésa, según mi entender! en la norma para tu poesía!"

Otra vez, querida ANNA, gracias mil por tus palabras. Ello aunque yo ya me sienta al margen (tanto que casi ya ni hago caso de la reglas ortográficas, y menos de las "novísimas") Tú sigue, sigue y no pares de escribir. Y si nadie te reconoce, sentirás cómo esa especie de vacío ilocalizable en tu interior, se va llenando (tal vez de letras, de oraciones, de frases, de párrafos... ¡de literatura! Te sentirás siempre mejor y aquellos que ignoren tus letras, no te quepa duda, ¡allá ellos!).
(Hace ya unos años, a trancas y barrancas, publiqué mi íltima novela.
En ella, todavía "ME" verías más. Sin que en absoluto parezca ningún ánimo de "contacto al uso" ni que te  huela a tal, si ves alguna forma de que, manteniendo tu anonimato, pudiera hacerte llegar el libro (aún me queda alguno)...
Para ANONIMUS:

Complejo, vive Dios, el tema que planteas.
¿Por dónde flota el AMOR?
¿Por donde tú dices? ¿De verdad asegurarías que está en el interior de cada uno de nosotros?

Empezaré diciéndote que soy de los que opinan que el Amor viene a ser como el aire que respiramos. Se acaba el aire; desaparece el Amor. ¡Todos al hoyo!
Sería una conversación magnífica (con alguna copilla delente, claro), tratar sobre este tema contigo y con quien tenga verdadero interés y no ganas de soltar gilipolleces.
Me has dejado con una duda importante, carajo (aunque soy de los que piensan que hay que huir del humano "segurísimo", sin duda alguna. Mi consejo: No te fíes jamás de ese gentío que pisa tan seguro)
En principio, te diré que el AMOR es algo tan grandioso que no puede caber, ni troceado, en el interior de cada ser. Ahora bien, sí que existe una, digamos, ciencia infusa, inyectada en el género humano que los hace saber del amor, de su esxistencia y de los caminos para llegar hasta él y aprovisionarse... Otra cosa es que sirvan, puedan o ni siquiera sepan ni lo que es ni cómo usarlo.

Para el SR. ARELLANOS: Ya hablamos de esto y mejor que por este medio. Delente de nosotros un café (descafeinado, cago en la leche) y unos chupitos sin "desalcoholizar" (¡a que no existe esta palabra, gente buena!). 

A todos, repito, gente amable, gracias. Flores verbales me habéis dedicado. Flores en fotografía os desvuelvo.

Besos, buen yantar y mejor gigestión.

(Pero, como otras veces, no nos olvidemos de Somalia, Nigeria, hambrunas mundiales y sangrientas crueldades en los hemisferios del sur... Amén)

DESVENCIJADO
Luis Ramírez de Arellano 

3 comentarios:

  1. No sé lo que tengo ni a dónde puedo llegar, acabo de leer las palabras que me has dedicado y de mis ojos, yermos como barrancos desde hacía años, están resbalando lágrimas.
    Me siento como una polilla a la que acaban de otorgar la corona de reina por un día. En su catarsis, puede que se convierta en mariposa o simplemente siga siendo un vehículo desprovisto, en apariencia, de sentimientos intensos.
    Recuerdo que de pequeñaja, mi familia siempre me tildaba de “ñoña” y, por ello, fui construyendo un muro inexpugnable a mi alrededor.
    Sucede que, sea por mis genes, por mi culto al cuerpo (y sólo para los que me conocen, también al alma), por Dios o por la madre que me parió, visualmente, siempre he sido agradable, lo cual me ha costado muchos disgustos.
    Tú has descubierto que soy algo más y me importan un pimiento los que puedan o no, descubrirlo, pero a ti te lo agradezco. Localicé ese vacío oculto del que hablas, hace mucho tiempo, y también el gozo de llenarlo con cada una de las palabras que surgen cuando me siento y me pongo a escribir, tanto que, a menudo, cuando releo lo concebido, me parece imposible que aquello haya salido de mí.
    Voy a tomarme la licencia de unir las dos partes de tu última publicación. Al respecto, he de decirte que tampoco sé lo que es el amor, pero sí sé, que estoy hecha de “ELLO”. A veces, me llaman corazón con patas, y en alguna ocasión, cuando mi madre agonizaba, he escuchado: ¡chiquilla cuánto amor puedes dar y que necesitada estás del mismo!.
    Todos lo llevamos dentro, muchos ni lo saben ni tan siquiera lo piensan y otros, nos pasamos la vida tras él. Cada uno lo entendemos de una forma… ni mejor ni peor, diferente, pero igual de buena para quien lo vive o lo sufre, en ese momento. El amor, lo es TODO, aunque cuando fenezcamos desaparezca con nosotros.
    Arellanos y tú, buena pareja, os imagino dilucidando de las banalidades de la vida tanto, o menos, que de la profundidad de la misma. Vuestro café y una buena copa de lo que se tercie, que para eso está.
    Nos volveremos a “ver”, MAESTRO, porque he leído a muchos, y no siempre el más conocido o el mejor, según todos, es el soplo de la verborrea que mana de mis antojos.
    Gracias, Ann@

    ResponderEliminar
  2. A mi esto me gusta. Pues muy bien, ya esta dicho.
    Tengo que decir que estoy un poco acomplejado, pero bueno, todos no tenemos las mismas gracias.

    ResponderEliminar
  3. Querido Jose Luis, disculpa mi tardanza en recoger el guante, si que me gustaría tratar el tema cuando quieras, ese y muchos mas...para tu información te diré que soy un nuevo Ramírez seguro que sabes quien...

    ResponderEliminar