miércoles, 23 de noviembre de 2011

Sigo FRIVOLIZANDO en plan POLITICAMENTE CORRECTO (Por si acaso)

Fotografía que divulga el diario EL PAÍS.
Ésta, concretamente, el 16-11-2011


Buena moza -no me digan que no- que en sus varias salidas en los medios -que yo sigo- siempre la sitúan en Sevilla. No sé si es nacida en la querida tierra andaluza, aunque merecería el sobrenombre de "LOZANA ANDALUZA".  De no ser así, y no más resultar que ejerce en Sevilla y ser oriunda de cualquier rincón de España, pues habrá que dar unos vítores a todos esos rincones que reparten por toda nuestra Piel de Toro frutos tan hermosos.

Encima de su porte, del gesto serio de su rostro que, a pesar de ello, irradia más gracia que la famosa sonrisa de Mona Lisa, y de su, con perdón, cuerpazo, PRESUNTAMENTE magnífico en mostrándose libre de tejidos, va y esta señora estupenda, resulta ser Juez -¡O Jueza, usted manda, doña Mercedes!-, y además anda metiéndoles mano de férrea tenaza judicial a una de tantas, tantísimas, demasiadas -¡qué asco, por Dios- tramas de corrupción y sinvergüenzas redomados que están surgiendo por toda España (no conseguirán cubrir de mierda la guapeza con que la señora Juez Alaya y sus saberes judiciales los va a enchironar (ojalá de por vida, so marranos).

Señora Juez, o Jueza, tanto da, yo es que la sigo a Vd. cada vez que sale en algún "medio". Mire, usted me toma como un PRESUNTO descarado si ahora, a continuación, le dedico unos cuantos "piropazos", PRESUNTAMENTE inocentes:

Mire usted, doña Mercedes, tiene  su humanidad, desde la coronilla a esos dedos que asoman por sus ¿sandalias con tacones?, una estampa encantadora y unos andares jacarandosos de enamorar a transeúntes. Usted, señora mía (¡ojalá!), bajo mi entontecido observar sus andares, no tiene piernas, ¡tiene, PRESUNTAMENTE! unos muslazos que yo ruego, le ruego, utilice para atenazar y ahogar a toda la panda de sinvergüenzas a los que lleva a juicio (Ojo, no me atrevo a pedir nada más -las querellas, en España, siempre nos caen a los mismos-). De su alto medio cuerpo que soporta tan agraciado rostro, tan encantadora sonrisa y más PRESUNTAS cosazas  de las que no me permito hablar, cada quién que se imagine mis PRESUNTAS deducciones. Sólo me faltaba a mí líos con una Jueza y, encima, tan bella. Ahora bien, si por mala ventura, algún follón indebido me envuelve, no lo dude, yo pediré, rogaré, suplicaré que me juzgue usted, señoría (algo así como, imaginando música de cuplé:... "Ay, júzgueme usted, por favor; qué delito he de cometer para entre sus manos justicia hallar, ay..."

Más en serio, amigos -PRESUNTAMENTE-: Me encanta que se encuentre en España una señora Jueza que ejerce como debe y encima, como añadido, sea una señora estupenda.

¿Me permite, doña Mercedes, que le remita un casto beso -PRESUNTO- por su buena labor y ese físico que algo  GRANDE le ha otorgado? ¡Pues, hala, hacia su mejilla ya viaja!

DESVENCIJADO
Luis Ramírez de Arellano









  

2 comentarios:

  1. Se acuerda Vd. Sr.Desvencijado de una canción que decia: "Como me gusta, me gusta, me gusta, me gusta.
    He oido por ahi ¿el que?
    Pues, lo que ha escrito y la juez.

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  2. Sin lugar a dudas, es una mujer de armas tomar: hermosa y con carácter, como debe de ser. De las que gustan o todo lo contrario.
    Parece que esta juez, además de ser inexpugnable en su trabajo, tiene lacrada su vida privada. Tanto mejor con su posición y los casos, mugrientos y fraudulentos, que investiga.
    Tengo claro que si la envidia fuera tiña, el mundo estaría repleto de tiñosos. Desconozco si esta “LOZANA ANDALUZA” es tan íntegra como parece, pero no tengo la menor duda de que más tarde o más temprano irán a por ella, tanto por su hermosura como por su, aparente, saber hacer.
    ¡Viva la juez Alaya!, que además de alegrarle a uno el día, no le tiembla la voz si tiene que decir a cualquier imputado “míreme a los ojos”. En algo me parezco a ella desde mi humilde cojín a ras del suelo: yo tampoco tomaba cafés con los compañeros-as. Así me ha ido, sin trabajo ni nadie que me avale. Claro, yo no tenía su categoría, aunque quizás, en otro campo, la pude tener: mea culpa. A lo hecho pecho.
    Jueza: no cambie; siga tan femenina y rigurosa como ahora lo es. Da gusto verla.
    Ann@

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