CUANDO SE INICIA EL OCASO...
... HAY QUE RECURRIR, MUCHAS VECES, AL DESPLANTE Y A LA GROSERÍA COMO ARMA DEFENSIVA, EA.
(Fotografía de Enero 2015)
Creo que todo el mundo es ya consciente de que eso de las TRES edades hace tiempo que pasó a la historia. Hoy, amigos, ya hay CUATRO. A saber: 1: Niñez, infancia y adolescencia (todo a la la vez; casi la más turbulenta). 2: Juventud e incipiente madurez (la más cachonda, si la aprovechas bien). 3: Tercera edad (vemos venir y manifestarse el declive). 4: Cuarta edad (estás de lleno en la lenta o rápida decrepitud. Para mí, ésta es bastante asquerosilla. Poca gente hay que pueda vivirla con la debida dignidad humana).
Hay un momento en el que no "los brotes verdes del gallego Registrador de la Propiedad", sino los "brotes bordes", junto con todos los adornos que los muy optimistas aceptan como naturales y que fijándose no más en los colorines e ignorando que eso es el disfraz de lo a medio pudrir o lo , ya echado a perder, junto con el oscurecimiento de la luz, ese tamiz a veces plúmbeo, a veces con un irritado rojo o carmesí, que va susurrando el adiós, la despedida, el que allá verás adónde vas a parar, pero que sin duda aquí vas a dejar de estar, pues es en ese momento, cuando uno ha terminado su Tesis vital, ya no puede evitar, en muchas circunstancias, el hacerla pública, contenga lo que contenga, y no esconderla por vergüenza (algo ocultará, Mr. Camps) o respetos humanos.
No. Tanto la Tesis como la edad alcanzada ya facultan a uno para poder vivir lo que le queda "A su manera, trailará" y no seguir con remilgos sociales desayunando ya con los indigestos "respetos humanos" o pusilánimes comportamientos diversos. Te has ganado, de una puta vez, el poder ser ya TÚ, y tratar tu decadencia, tus achaques, tu cansancio y tus heridas como coños te dé la gana, sencillamente porque son los tuyos y nunca podrán ser los consejos de los demás, ni sus opiniones sobre lo que haces o dejas de hacer.
Tengo gente amiga a la que no preciso ni ofender ni despachar de mala manera. Me dejan estar tal cual soy al tiempo que yo los dejo a ellos, y colorín colorado, el cuento se ha acabado y nos llevamos con la debida empatía sin criticarnos mutuamente lo que cada quién es o hace o deja de hacer. (Atención: Esto nada tiene que ver, no nos confundamos, con la amistad que por pura cercanía y hasta cariño mueve a alguna de estas personas a pedirte si lo dejas colarse en tus adentros e intentar hablarte de algo bueno para ti. Ésa es otra cosa. ¿Está claro?).
Paradójicamente, surge el conflicto (curiosamente milenario, según lo que uno lleva leído) cuando son los más cercanos, los te rozan diariamente, los que componen eso tan raro que se llama familia, los que más te dan el coñazo, más se meten o menos te dejan vivir en paz.
Para intentar ser breve hoy, sólo comentaré un ejemplo: "Es que no HACES NADA, no te mueves, no..." ¡Hasta las mismas gónadas ando ya de escuchar esta frase, o parecidas, a mi dirigida. Yo, que no puedo ni preguntar a estos "cercanos" cuántos kilómetros se han corrido en la semana (está muy de moda esta cosa de correr), y no lo hago, antes que nada porque me da completamente igual lo que hagan con sus piernas, con su corazón y con toda su estampa, y, además, porque sólo de pensarlo, ya me canso yo, ¡no te jode! A mí jamás se me ocurre preguntarles, por ejemplo, qué libro están leyendo... Parece que el entrenar las neuronas no embellece. Quizás, pero ayuda un huevo a entender a los demás y dejarlos tranquilos a todos con sus manías y cosas, ojo, en tanto no me molesten a mí.
Ayer, sin ir más lejos, tuve lo que, para mí, significa un día lleno y completo:
1º - Desayuné de maravilla en ARÁBICA (hasta hace poco, Aromas). Grata ingesta, sana y bien humorada y educada gente, sonrisas, alguna risa abierta...
2º - Caminé lo justo: Recoger el periódico, el poco largo hasta la farmacia al que me obliga mi CUARTA edad; volví a casa por el lado contrario, por moverme algo más, aunque sin pasarme, ¿eh? No me vayan a doler las lumbares, los pies, o no sé qué coño raro dolor se me ha manifestado últimamente por las ingles y muslos.
3º - Como música de fondo puse la última recopilación de PACO DE LUCÍA, sintiendo algo extraordinario al llegar a la pieza "MALAGUEÑAS" de LECUONA. "Pa cagase".
4º - En tanto me invadían las gloriosas notas que los dedos de Paco de Lucía arrancaban a las cuerdas de su guitarra, escribí algo manuscrito en esos diarios secretos que llevo que sólo se abrirán cuando yo la diñe y puede que hagan explosión por sí mismos o los hagan explotar y quemar y aventar las cenizas en cualquier vertedero.
5º - Intenté escribir algo en este trasto que pudiera valer la pena, en primer lugar para mí, en segundo para alguna, poca, gente amable que lo lee.
6º - Cuando de ésto me cansé, me enganché al libro que estoy leyendo (DUBLINESCA de ENRIQUE VILA-MATAS - Ed. Seix Barral, uno de los cuatro o cinco genios literarios que tenemos en España, que me suena conocen más en toda Europa y resto del mundo por haber sido traducido a muchas lenguas, que aquí mismo, en su país. Él se dice "español", aunque sea catalán de pura cepa.)
En el momento me empezaron a escocer los ojos -delicias maravillosas de la preciosa vejez, ¡hay que joderse!-, lo dejé, descansé algo así como un cuarto de hora, sólo escuchando música. Hasta que se hizo el momento y la hora de bajar al ARÁBICA a tomar mi cerveza "0,0" -más "regalitos" de estos bellísimos años-.
Por la tarde, incluyendo la bajadita al ARÁBICA, no sé, un descafeinado con leche, otra de esas mierdas de "0,0", un poco más de lo mismo. Y ahora, con estos fríos tan exagerados para nuestra Valencia, no me da la real gana el "ir de paseo": Se me encogen las bolicas hasta el tamaño de pequeñas canicas de un duro hielo que tarda en deshelarse, y el palito de en medio se me convierte en una ridícula estalactita de cuyas últimas goticas de las micciones surgirán en los zapatos algunas estalagmitas por ver si se juntan con las que bajan, o están bajas siempre -¡qué asco, leche!
Luego, algo, poco, del mercado de las tertulias televisivas, casi gallineros que, precisamente este año, con la movida que ha organizado el tal IGLESIAS y otros (movida que particularmente yo consideraba necesaria, aunque con el año de follón que tenemos por delante no sé siquiera a quién votaré), nos van a dar por todos lados.
Y, por fin, antes de estirarme en la piltra, pude disfrutar, de casualidad, de una bastante buena película en la "2" (cadena desprestigiada muy indebidamente; buenas películas, buenos documentales y excelentes reportajes)
Con la pastillita de mi cuarta edad y el cansancio de no haber hecho NADA en todo el día, he dormido bastante bien lo que estos putos años me dejan, entre cinco y seis o seis y media horas, nada más. ¡Claro, como no hago NADA!
Tengo gente amiga a la que no preciso ni ofender ni despachar de mala manera. Me dejan estar tal cual soy al tiempo que yo los dejo a ellos, y colorín colorado, el cuento se ha acabado y nos llevamos con la debida empatía sin criticarnos mutuamente lo que cada quién es o hace o deja de hacer. (Atención: Esto nada tiene que ver, no nos confundamos, con la amistad que por pura cercanía y hasta cariño mueve a alguna de estas personas a pedirte si lo dejas colarse en tus adentros e intentar hablarte de algo bueno para ti. Ésa es otra cosa. ¿Está claro?).
Paradójicamente, surge el conflicto (curiosamente milenario, según lo que uno lleva leído) cuando son los más cercanos, los te rozan diariamente, los que componen eso tan raro que se llama familia, los que más te dan el coñazo, más se meten o menos te dejan vivir en paz.
Para intentar ser breve hoy, sólo comentaré un ejemplo: "Es que no HACES NADA, no te mueves, no..." ¡Hasta las mismas gónadas ando ya de escuchar esta frase, o parecidas, a mi dirigida. Yo, que no puedo ni preguntar a estos "cercanos" cuántos kilómetros se han corrido en la semana (está muy de moda esta cosa de correr), y no lo hago, antes que nada porque me da completamente igual lo que hagan con sus piernas, con su corazón y con toda su estampa, y, además, porque sólo de pensarlo, ya me canso yo, ¡no te jode! A mí jamás se me ocurre preguntarles, por ejemplo, qué libro están leyendo... Parece que el entrenar las neuronas no embellece. Quizás, pero ayuda un huevo a entender a los demás y dejarlos tranquilos a todos con sus manías y cosas, ojo, en tanto no me molesten a mí.
Ayer, sin ir más lejos, tuve lo que, para mí, significa un día lleno y completo:
1º - Desayuné de maravilla en ARÁBICA (hasta hace poco, Aromas). Grata ingesta, sana y bien humorada y educada gente, sonrisas, alguna risa abierta...
2º - Caminé lo justo: Recoger el periódico, el poco largo hasta la farmacia al que me obliga mi CUARTA edad; volví a casa por el lado contrario, por moverme algo más, aunque sin pasarme, ¿eh? No me vayan a doler las lumbares, los pies, o no sé qué coño raro dolor se me ha manifestado últimamente por las ingles y muslos.
3º - Como música de fondo puse la última recopilación de PACO DE LUCÍA, sintiendo algo extraordinario al llegar a la pieza "MALAGUEÑAS" de LECUONA. "Pa cagase".
4º - En tanto me invadían las gloriosas notas que los dedos de Paco de Lucía arrancaban a las cuerdas de su guitarra, escribí algo manuscrito en esos diarios secretos que llevo que sólo se abrirán cuando yo la diñe y puede que hagan explosión por sí mismos o los hagan explotar y quemar y aventar las cenizas en cualquier vertedero.
5º - Intenté escribir algo en este trasto que pudiera valer la pena, en primer lugar para mí, en segundo para alguna, poca, gente amable que lo lee.
6º - Cuando de ésto me cansé, me enganché al libro que estoy leyendo (DUBLINESCA de ENRIQUE VILA-MATAS - Ed. Seix Barral, uno de los cuatro o cinco genios literarios que tenemos en España, que me suena conocen más en toda Europa y resto del mundo por haber sido traducido a muchas lenguas, que aquí mismo, en su país. Él se dice "español", aunque sea catalán de pura cepa.)
En el momento me empezaron a escocer los ojos -delicias maravillosas de la preciosa vejez, ¡hay que joderse!-, lo dejé, descansé algo así como un cuarto de hora, sólo escuchando música. Hasta que se hizo el momento y la hora de bajar al ARÁBICA a tomar mi cerveza "0,0" -más "regalitos" de estos bellísimos años-.
Por la tarde, incluyendo la bajadita al ARÁBICA, no sé, un descafeinado con leche, otra de esas mierdas de "0,0", un poco más de lo mismo. Y ahora, con estos fríos tan exagerados para nuestra Valencia, no me da la real gana el "ir de paseo": Se me encogen las bolicas hasta el tamaño de pequeñas canicas de un duro hielo que tarda en deshelarse, y el palito de en medio se me convierte en una ridícula estalactita de cuyas últimas goticas de las micciones surgirán en los zapatos algunas estalagmitas por ver si se juntan con las que bajan, o están bajas siempre -¡qué asco, leche!
Luego, algo, poco, del mercado de las tertulias televisivas, casi gallineros que, precisamente este año, con la movida que ha organizado el tal IGLESIAS y otros (movida que particularmente yo consideraba necesaria, aunque con el año de follón que tenemos por delante no sé siquiera a quién votaré), nos van a dar por todos lados.
Y, por fin, antes de estirarme en la piltra, pude disfrutar, de casualidad, de una bastante buena película en la "2" (cadena desprestigiada muy indebidamente; buenas películas, buenos documentales y excelentes reportajes)
Con la pastillita de mi cuarta edad y el cansancio de no haber hecho NADA en todo el día, he dormido bastante bien lo que estos putos años me dejan, entre cinco y seis o seis y media horas, nada más. ¡Claro, como no hago NADA!
(Con esta sencilla viñeta, el gran ROTO sintetiza todo un artículo que explique el fenómenos de PODEMOS, CIUDADANOS, Y TODOS LOS DEMÁS)
DESVENCIJADO
Luis Ramírez de Arellano
3 Febrero 2015
Sencillamente: A cagar, si si, A CAGAR, sin mas. Ya, ya se que lo tiene claro, pero a veces hay que decirlo así de claro hay que oírselo a uno mismo. Es como cuando lees en voz alta.
ResponderEliminarVamos a ver, otra vez: A CAGAR. Osados, atrevidos e ignorantes.
Quien sabe nadie, y eso que no puedo con el Rafael (Y no me sale de los cojones llamarle con “ph”)
Yo avise con tiempo, y a mi por lo menos en la cara no me dicen (nadie que me conoce): ¿Tu no haces nada ? O, Tu que tienes tiempo, O, o, o..
Algún imbécil que no me ha visto hace tiempo alguna vez se le ha ocurrido preguntar: ¿Macho tu que haces? No, no le dije lo que esta de moda y se dice en la películas, hacerlo con tu mujer y tu hermana cuando te vas a jugar.......
Xe, tu, A MAMAR.
Que es bueno caminar, claro, nadar, claro, tocar el violín, claro, ir a la Universidad, claro.
Y escuchar música sin parar y leer un buen libro yyyyy.. CLARO.
Y, a mamar, coño! “”Quien sabe NADIE.””