SIGUE (Dios, Religión...)

Fotografía de Abril de 2006.

De cualquier aridez, aparentemente yerma, puede la vida mamar savia; y no por fuerza ni vida ni savia "oficial".

NO ENCUENTRO RESPUESTA, LAS RESPUESTAS NO LLEGAN SIEMPRE CUANDO UNO LAS NECESITA; MUCHAS VECES OCURRE QUE QUEDARSE ESPERANDO ES LA ÚNICA RESPUESTA POSIBLE.

(José Saramago).

Empezaremos por todas aquellas "cosas" en las que la Iglesia Católica no para de incidir más y más sin nunca llegar a darse cuenta de que el humano avanza, evoluciona en inteligencia, en razonamiento; que la época que narra Umberto Eco en su magnífica novela "El nombre de la rosa", en la que todo aquél que, después de conseguir cruzar "el laberinto", alcanzaba el libro "de la risa", del saber, caía fulminado por "las trampas" del guardián del oscurantismo, lo que más poder daba a la Iglesia, el analfabetismo de la plebe. Todo esto se acabó hace ya mucho tiempo. Aunque sea bien cierto que siguen existiendo gentes que ni quieren ni persiguen elucubraciones para sus meninges..." ah, yo, lo que la Iglesia diga, lo sigo y ya está..." (lo conozco, hombre. Por otro lado es lógico en este ejemplo, en cualquier discurrir de su vida ha evitado de forma muy habilidosa problemas y sofocos).

Le cuesta muchísimo a la razón del bípedo racional "tragar" eso del "creacionismo". A lo mejor os suena a pregunta estúpida (en mi defensa, que cuando a uno lo lían de estas guisas, acaba como Picaso, queriendo y consiguiéndolo, ser un niño pintando), pero, decía, ¿por qué sólo el humano expresa sentimientos: dolor, risa, bienestar, pesadumbre; sonidos de esos sentimientos: "tengo hambre", "tengo miedo", "me encuentro muy bien", "te amo", "te odio"... Primero la expresión de cara y cuerpo, en seguida el habla, el lenguaje... ¡la comunicación sonora, hablada!. ¿Por qué el resto de la creación animal no "se expresa"; no más sonidos a los que hemos puesto nombre: mugido, ladrido, rebuzno...?

Si esto lo tengo clarísimo: totalmente imposible que mi razón asuma el "creacionismo". Vale. El problema se me plantea cuando con la "evolución" me asalta el mismo quebradero de cabeza: Los hombres seguimos expresándonos, comunicándonos con el lenguaje; los animales no. ¿Qué grandísimo misterio es este latir humano? La evolución ha dotado a los animales para su medio: depredadores, veloces, cazadores, rapaces con garras terroríficas, nocturnos de visión aguda... Pero -siempre los peros de la duda- al hombre "la inteligencia", que para colmo tan pésimamente empleamos, y tantas veces para destruir, someter y envilecer la raza y vida de "los que no hablan, bípedos de cuatro patas", de los inferiores. Desgraciada definición esa para el hombre que lo llama "Rey de la Creación". Vaya reyes de mierda que somos.

Bien, al que consiga descifrarme -y que yo lo entienda, ojo- lo de "la vida del humano", es decir, sentimientos, expresión corporal y hablada de los mismos, lágrimas y risas abiertas, ¡de dónde cojones viene! ¡Qué enorme, grandioso ALGO nos ha dotado de ellos. (A fin de cuentas es el mismo ALGO en cuya búsqueda desesperada llegamos al ligue con La Parca).

Otra cosa: La Iglesia Católica se ha pasado su vida ponderando y enalteciendo el amor entre hombre y mujer y su mutuo "conocimiento" en un bendecido lecho conyugal. A ver, oigan, digan: ¿Por qué narices el gran JESÚS de Nazaret, tuvo que engendrarse de forma tan increíble? José, el Carpintero, fue a buscar -o comprar- una joven esposa (según las costumbres de aquellos años, él debía de ser un hombre maduro, cercano a la cincuentena que necesitaba mujer en su casa. Ella, María, una joven de unos 17 años, edad en que aquellos padres ya querían verla casada o perderla de vista, no lo sé. ¿No es más lógico que el, para aquellos entonces, viejales José, el bueno del carpintero, se sintiera enamorado como un loco de la juventud de María y engendraran a nuestro JESUS? ¿No es tremendamente más grande y humano este suceder que el buscarle 6 piernas al gato y obligar a la gente a que se lo crea con eso de la FE?

¿No sería igual de grande y comprensible que María hubiese sido retratada como una normal joven virgen de aldea, recatada y al cuidado de sus padres, en lugar de en un concilio de no sé cuántos años después, declarar "dogma de Fe" su inmaculado nacimiento, que, por otro lado, no hacía ni puñetera falta, dado qye hoy todavía nadie entiende eso del "pecado original"... ¡¿Pero, oye, qué animalada has hecho en el limbo para aterrizar aquí ya con pecado?! Perdón, pero son tal cantidad de estupideces cuya demostración se expone en la visita a cualquier misa de cualquier parroquia capitalina: Buena gente, desde luego, pero arrastradas por la inercia de un pensamiento en huelga de actividad o todavía intentando entender algo, no hay más, salvo unos cuantos jóvenes, inmaduros -lo siento, poco formados- que el cura o párroco de turno se camela para que le toquen las guitarras y le canten en alguna misa.

Como casi siempre, se me va el tiempo. Pero seguiré. Me quedan cosas no en el tintero sino en el alma.

DESVENCIJADO

Luis Ramírez de Arellano.